¿Eres de los que piensa que el alquiler ha llegado a España para quedarse? ¿o crees que seguiremos dispuestos a comprar nuestra propia vivienda?

Tras la gran crisis que ha azotado a España en los últimos años, el alquiler ha experimentado un cambio en su crecimiento llegando a grandes índices, mas ¿realmente han decidido apostar los españoles por el arrendamiento o bien este apogeo se debe solamente a que la mayoría no ha podido elegir porque comprar casa era imposible?

Si tuviésemos encima de la mesa un alquiler mensual de 600 euros y una cuota hipotecaria del mismo importe, ¿qué es lo que elegirías?, ¿volverías a dejarte llevar por nuestra ansia de propiedad?, ¿o seguirías pensando que alquilar es tirar el dinero?

El mercado podría enfrentarse en los próximos años a una gran encrucijada puesto que, por un lado, la residencia es ahora un 40% más asequible que hace ocho años, se ha abierto el grifo de la financiación y mejoran el uso y la confianza, mientras que por otro, los alquileres llevan un par de años consecutivos de subidas tras siete años a la baja. Solo en 2016 se encarecieron prácticamente un 7%, el mayor incremento anual de los últimos diez años.

Además, en contraste a lo que pasa en el mercado de compraventa, donde el comportamiento de los precios es muy diferente, los alquileres subieron en todas y cada una de las comunidades menos en La Rioja.

Llegar a tener una residencia en propiedad está en la cabeza de muchas personas en España, aun entre quienes en nuestros días viven en régimen de arrendamiento hay una clara preferencia por la adquisición. En verdad, prácticamente cinco de cada diez inquilinos preferiría una residencia en propiedad, al paso que 6 de cada diez opinan que alquilar no es una opción rentable en un largo plazo.

Incluso los llamados ‘millennials’, es decir, aquellos cuya edad se mueve entre los dieciocho y los 35 años, sueñan con tener una casa en propiedad en un futuro cercano, puesto que consideran esta forma de vida como una situación temporal y muestran una mayor pretensión de comprar en el futuro que otras generaciones benideras. Eso sí, no tienen tanta prisa por adquirir casa, en tanto que no contemplan dar el paso hasta dentro de 5 años.

Simulación de hipoteca y alquiler

«Supongamos que una persona de 30 años, con unos ingresos fijos de 1300 euros por mes, pide una hipoteca para una residencia de 50 metros cuadrados. El coste medio de la vivienda por metro cuadrado es de 1.628 euros, así que para una vivienda de esas dimensiones, el coste será de 82.000 euros. Si tomamos en cuenta que las entidades bancarias financian sobre un 80 o 82% de la residencia, necesitaríamos una hipoteca de 65.600€, pues pondríamos de nuestro bolsillo 16.400 euros, el 20 por ciento sobrante.

Con un periodo máximo de amortización de 30 años, y cogiendo como un ejemplo de las mejores ofertas del mercado, un interés de euríbor +0,99 por cien , la cuota mensual sería de 210 euros y el importe anual de 2520 euros. Al concluir la hipoteca habríamos pagado un total de 75.600 euros, de los cuales 10.000 euros corresponderían únicamente a intereses.

Si nos marchamos de alquiler y no tenemos intención de hipotecarnos nunca, pagaríamos una renta mensual de 362 euros (en función del precio medio de alquiler por metro cuadro de 7,24 euros el metro cuadrado por cincuenta metros de vivienda). Por año serían unos 4.344 euros, por lo que a 30 años habríamos pagado un total de 130.320 euros en alquiler.

O sea, estaríamos hablando de una hipoteca de 210 euros frente a un alquiler de 362 euros. Y un desembolso de 91.160€ si adquirimos en frente de 130.320 si arrendamos. Por año se ahorran unos 1850 euros. Aunque es cierto que cuando se compra una residencia y se hipoteca no tenemos la totalidad de la propiedad hasta que no se ha pagado el importe total del préstamo y, si contratamos a tipo variable, estamos más expuestos respecto al alquiler, a la variación de nuestra cuota.»

Adquirir o bien alquilar, ¿qué prefieren los españoles?

Históricamente, España ha sido un país con una cultura de dueños muy arraigada. Pese a que la crisis ha perjudicado de forma notable al mercado inmobiliario, no ha provocado un cambio radical de mentalidad en la sociedad en este sentido. En verdad, España se sigue sosteniendo entre los países de la UE con mayor porcentaje de propietarios.

Según una encuesta efectuada por Fotocasa, nueve de cada diez entrevistados afirma que, pese a la crisis, el comprar una vivienda sigue siendo muy arriesgado. Este vínculo con la propiedad se comprende gracias al papel de rentabilidad que la sociedad española asocia a la vivienda, puesto que 7 de cada 10 españoles estima que a largo plazo poder comprar su propia vivienda (ya sea un piso de banco o de segunda mano) es mucho más rentable que alquilar un piso para siempre, independientemente de la generación a la que pertenezcan. Por esta razón, no sorprende que prácticamente la mayor parte de los españoles siga prefiriendo comprar un inmueble frente a vivir de alquiler. Incluso quienes hoy día viven en régimen de arrendamiento existe una clara preferencia por la adquisición de su propia vivienda.

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