• Los bancos españoles son los únicos que han subido los tipos pese a lo negativo del Euribor.

La banca española situada como la que más cobra por préstamos de consumo y también la que menos paga por depósitos en toda europa, ahora se postula también como la que más tipo de interés aplica en sus hipotecas de nueva contratación. Se trataba de un hecho del que siempre presumían y es que los bancos de nuestro país han dejado de lado el ser los más baratos para la contratación de préstamos de vivienda.

Ya por diciembre del pasado año, la contratación de hipotecas española era la segunda menos costosa para los clientes de las entidades financieras. Pero durante el pasado mes de Septiembre la situación ha cambiado debido a que ya son las terceras más caras de toda europa. Según datos estadísticos recogidos en el BCE sólo Holanda e Irlanda se encuentran con tipos más altos que España.

Empuje de las Hipotecas Fijas

La banca española, a pesar de la guerra abierta en la captación de hipotecas, ha frenado la caída de costes en los últimos años. Por un lado, en los créditos a tipos variables, las entidades están incorporando tasas fijas en el primer y el segundo año más altas, que exceden en algún caso el 2%.

Para el resto de ejercicios, usan como gancho diferenciales sobre el euríbor que bajan, aun del 1%.

Por otra parte, las entidades están promoviendo la contratación por parte de los clientes del servicio de hipotecas a tipos fijos mixtos o puros que, por norma general, son más elevados que en las de intereses variables. En nuevas operaciones, el 54% tienen costos estables, según los datos de la Asociación Hipotecaria De España (AHE).

De manera previsible, el sector continuará con esta estrategia con el propósito de resguardarse de los impactos de euribor en negativo y de la disminución del negocio. En el mes de septiembre, el saldo crediticio del conjunto de bancos, cajas y cooperativas de crédito se redujo interanualmente casi un cinco por cien , debido a la mengua que experimenta todavía la actividad hipotecaria y, asimismo, los préstamos a la grandes compañías.